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Políticos 0.2 en campaña 2.0, confundiendo cantidad con calidad

A punto de terminar la campaña electoral, es el momento adecuado para hacer balance de cómo nuestros políticos (y/o sus asesores) han venido gestionando las herramientas sociales 2.0.

La conclusión es bien sencilla: MAL. En su mayoría, no entienden la filosofía 2.0, no conocen ni entienden las herramientas, que utilizan como canales de comunicación tradicionales, es decir, unidireccionales. ¿Por qué? ¿acaso no tienen asesores expertos en el tema, o es que no les hacen caso?

Aunque la participación de los políticos españoles en las redes sociales ha experimentado una «gran evolución» para transmitir la idea de diálogo con los ciudadanos (aunque solo sea como “imagen”), el uso de estas herramientas por parte de los candidatos socialista y popular está más enfocado a reproducir sus ideas, unidireccionalmente, como un mero altavoz (ver Expansión).

Esa es una de las conclusiones que se desprenden del «Estudio sobre políticos 2.0«, elaborado por la agencia Ketchum Pleon . «Tú háblame de lo que quieras que yo te contesto lo que me dé la gana» es una frase que, según la directora de Ketchum Digital, Ludi García, podría resumir la actividad en las redes sociales de Alfredo Pérez Rubalcaba y Mariano Rajoy.

OTRAS OPINIONES:

Gaby Castellanos: Los politicos siguen haciendo en online lo mismo que hacen en offline. Intentan hacer una especie de mitin online donde ellos hablan, y no escuchan a nadie. Les importa la masa y les da igual si su sentimiento es positivo o negativo mientras abulte en un Treding Topic/Mitin.

Los partidos politicos no tienen ni idea de Social Media y Redes Sociales. No saben usar ni Twitter ni Facebook para lo que sirven. Y ademas se quieren aprovechar de ellos, cuando les conviene.

Está claro que de verdad ninguno de los candidatos ha sabido ni entender el medio, ni aprovechar la potencia, ni aportar valor, y mucho menos sacarle provecho. Y si eso lo extrapolamos a la vida offline, seguimos entendiendo que no escuchan a la audiencia y tampoco se interesan por saber lo que necesita.

Creo que al igual que en Social Media, no se es mejor que la competencia siendo un TT o teniendo un batallón de perfiles (fakes o no) atacando al contrario, se gana en SM teniendo una comunidad fidelizada, que cree en tu producto, en tu marca, en ti. Y nosotros en estos momentos, ni somos fieles (a nivel general) ni estamos fidelizados, no creemos en quienes tienen la posibilidad de ganar, y hacemos pagar a otros no votando.

Ojala mañana no gane ningún partido, y que gane España. Que no es otra cosa que los heterosexuales, los parados, los homosexuales, los trabajadores, los empresarios, los mayores, los pequeños, los hombres, las mujeres, los transexuales y todos aquellos que hemos venido a trabajar por este pais, porque es el pais de las oportunidades.

Y sobre el Social Media, creo que ya es más que claro que es puro sentimiento, pura emoción, y los corazones no se ganan con mítines políticos, ni conversaciones unidireccionales y mucho menos, haciendo TT.

María Tejero: #20N: los candidatos suspenden en #Twitter

Es cierto que desde fuera siempre se ven los errores mejor que desde dentro, y supongo (o espero) que habrán hecho un profundo análisis antes de elaborar su estrategia de Social Media, pero hay principios que hasta un estudiante del curso de Community Manager de Fanta sabe y que ellos están ignorando… En conclusión, todos los candidatos han suspendido en alguno/s de estos puntos básicos y lo peor de todo es que se habrán dejado un dineral para eso… Tengo curiosidad por saber qué van a hacer con estas cuentas una vez que pasen las elecciones, ya que recordemos que un político debe acordarse y conversar con los ciudadanos durante todo el año, y no solo durante la campaña electoral.

Liliana Gómez: ¿Para qué le sirven los medios sociales a los políticos?

Esta es la pregunta que se hacen infinidad de candidatos y que también nos hacemos los seguidores que escribimos a sus cuentas sin tener respuesta y sin ser seguidos, que además recibimos información como si se tratara de un boletín de prensa o un folleto de propaganda. Pienso que muchos políticos y aún muchos asesores en comunicación todavía piensan que hay que estar en los medios sociales por estar, como una moda o porque los otros están y se les olvida que esta es una herramienta para llegar a una parte de la población que es activa, participativa y que sabe que trabajando en red se puede construir y también llegar a la agenda de los medios tradicionales que en últimas permite que un tema llegue a la opinión pública. Entonces, ¿por qué los políticos siguen sin saber qué hacer con medios sociales como twitter o blogs?  La respuesta es falta de conocimiento o una asesoría inadecuada en el tema de la creación de redes, de la necesidad de bases de datos y de la necesidad de segmentar la información.

Elena Barrios: ¿Se hablarán algún día nuestros políticos por las redes sociales?

Me parece que de momento no, o al menos aún no lo hemos visto en esta campaña electoral. Nuestros políticos, o mejor dicho los candidatos de los dos grandes partidos, aún no se han dirigido la palabra entre ellos dentro de las redes sociales. ¿Y para qué?, se preguntarán muchos. Pues para lo mismo que para lo que han venido a las redes: para que les veamos todos… Pero hoy han estado a punto de hacerlo en otra red. Ha sido en Google+.

Gema Díaz PalomarReflexiones sobre la Comunicación Política: III Jornada de Comunicación Corporativa 2.0 de la Universidad Carlos III de Madrid

Menos mal que en la red surgen iniciativas mucho más divertidas que las lanzadas por las maquinarias electorales de los partidos, como la pelea interactiva entre Rajoy y Rubalcaba, en la que todos los ciudadanos podemos participar: Alfredo ‘Zapatobomba’ contra Mariano ‘Pulpogallego’

SUGERENCIAS PARA POLÍTICOS 0.2:

– Agencia 101: Los 10 mandamientos para hacer una buena campaña electoral 2.0. El estudio de 101 “¿Cómo hacer una buena campaña electoral 2.0?” revela que los partidos han pasado del patrullaje callejero, megáfono en mano, y de las grandes plazas taurinas al altavoz social de las redes, convirtiendo Twitter en el centro del mitin electoral por su inmediatez y capacidad para condensar mensajes clave en pocas palabras.

– Pedro Rojas (Senior Manager) es más drástico, recomienda a los políticos tuiteros que se hagan un “harakiri” digital en su Manual de twitter para políticos que ya están en twitter: “Viendo cómo los políticos no terminan de entender la cultura 2.0, ni las ventajas de esta extraordinaria herramienta, y viendo cómo aún siguen intentando “meternos” la misma forma de hacer política de siempre, parece que la única solución es que se queden afuera de Twitter, y otras herramientas 2.0, hasta que aprendan que el social media no es una vía más para hacer propaganda electoral.”

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#UOCMeet: La comunicación política y las TIC. Campañas políticas 2.0

Ayer tuve ocasión de ser invitado a asistir a un debate sobre “La comunicación política y las TIC”, organizado por UOC Alumni, con la participación de los consultores políticos Toni Aira (@toniaira) y Xavier Peytibi (@xpeytibi).

Se trataba de compartir opiniones respecto a lo que pueden aportar las TIC en el proceso comunicativo en política: cómo se integran las redes sociales en las estrategias de comunicación de los partidos, cómo estas propias redes remueven el concepto mismo de participación política, cómo las TIC pueden influir en la actividad política y la percepción que se tiene desde la sociedad.

El debate arrancó con una conclusión, compartida con los asistentes y con la mayoría de analistas: los candidatos sólo miran cifras, TT, seguidores, etc.; se empeñan en primar la cantidad por encima de la calidad de fans en las redes.

Todos recordamos las declaraciones de unos y otros políticos, jactándose de haber alcanzado Trending Topics con el nombre de su partido, de su candidato, o de su lema de campaña (Ver Expansión: Cuando el ‘trending topic’ es la nueva encuesta electoral). En lugar de esto, deberían interesarse en quién habla bien de ellos; en cómo conseguir que la gente interactúe, aportando contenido interesante, innovador; y en hacer campañas, no limitarse a distribuir contenidos.

Las campañas online deberían haberse planteado estos objetivos:

  1. Difusión de lo que se hace/dice.
  2. A partir de lo que se interactúe con la gente, aportando contenidos, se activan para hacer campaña por los candidatos desde su casa, en su entorno, con el boca-oreja.
  3. VRM (Vote Relation Management) System: gestionando bien las bases de datos de simpatizantes, con encuestas, recogida de ideas y de datos (e-mail y Cod. Postal).
  4. (Sólo en USA): Foundraising, es decir, financiación de campaña.

En general, los ponentes estiman que una campaña en internet no da votos (sería una condición necesaria pero no suficiente), pero sí que:

  • Recupera antiguos votantes.
  • Desactiva votantes indecisos de otros partidos.
  • Aprovecha la creatividad de los simpatizantes.

En cuanto a las herramientas 2.0 en España, se considera que lo que realmente sí está funcionando es la “guerra de videos”; en este sentido, cabe destacar la labor del equipo del PP, que es capaz de lanzar en 48h. una réplica en respuesta a los videos del PSOE, y con un mensaje en positivo (Antoni Gutiérrez-Rubí: Videos de respuesta rápida).

Si bien en los últimos años las campañas digitales se venían centrando en los blogs (y videoblogs) y después en Facebook, ahora la herramienta favorita es Twitter, auténtica revelación en estas elecciones, aunque como ya se ha dicho, mal empleada como mero transmisor de información, y absolutamente incomprendida por los equipos de campaña. Estos últimos días, se han producido diversas anécdotas al respecto, como por ejemplo:

  • Caso #FreeNaniano
  • Caso #Prostituit
  • Caso #PuntosRubalcaba
  • Evolución del avatar de @ConRubalcaba, que pasó de ser un logo, a un código QR, y finalmente la cara del candidato.
  • Ni Rubalcaba ni Rajoy se libraron de tener falsos perfiles (fakes).
  • Twittervista a Rubalcaba, que no era tal, sino una entrevista realizada a través de twitter y contestada convencionalmente. En definitiva, una mera pose para aparentar modernidad, y lograr un buen titular con una buena foto. Se le formularon 2.400 preguntas por Twitter, de las que respondió verbalmente 69 en 45 minutos, moderadas por Antoni Gutiérrez-Rubí, en la redacción de EL PAÍS.

En general, nuestros políticos están habituados a adaptarse a los medios de comunicación, que son los auténticos (y habituales) transmisores de la información a los ciudadanos. El propio Rubalcaba, reconocido como hábil comunicador, fue quien en el congreso del PSOE del 2000 le dio un consejo a Zapatero, que éste ha aplicado a la perfección: “No digas nunca ante la prensa una frase que no quepa en un titular”. Y así lo hizo.

Estamos en una democracia “catódica”, en la que es la política quien se adapta al medio (que ahora es la TV) y no al revés. Es por eso que los políticos se han entrenado para lanzar mensajes cortos, directos, personalizados, que afecten a las emociones, y sobre todo, que quepan en un titular.

“Olvidamos lo que dijeron, incluso lo que hicieron, pero nunca olvidamos lo que nos hicieron sentir” (by Yuri Morejón).

La conclusión final del debate es que la filosofía de la web 2.0, que se resume en dos conceptos: diálogo y compartir, no se está aplicando desde los partidos políticos. Algunos políticos, individualmente, y algunos partidos sí lo están haciendo, pero no son los que ganan las elecciones (Como Reagrupament, o Ciutadans). Por otro lado, los partidos grandes se “barnizan” con ciertos guiños hacia movimientos sociales como el 15-M, pero que en realidad son solo pose, no acaban de comprender lo que está pasando, y corren el riesgo de distanciarse cada vez más de la ciudadanía.

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Nuestros políticos en la red: Del #prostituit a #puntosRubalcaba

Que nuestros políticos son unos aprendices en el mundo de las redes sociales, y de la política 2.0, es un hecho más que conocido. Y cada día nos lo demuestran.

Es evidente que todos los que utilizamos las redes sociales nos podemos equivocar, y es nuestro deber aprender de nuestros errores para ir mejorando la comunicación en las redes. Aún más fácil sería aprender de los errores ajenos, gracias a la rápida difusión de lo que en el mundo de la formación llamamos «casos de estudio», y que en el argot popular llamamos «cagadas» 2.0. Lo que sobrepasa mi capacidad de asombro es que algunos, ni aún así, aprenden.

Hoy tenemos un nuevo caso de estudio, en la línea del #prostituit del PP, los #puntosrubalcaba del PSOE, que están animando nuestras pantallas esta tarde, gracias al Programa de Puntos del candidato socialista.

Según cuenta El Economista, primer medio digital en comentar la noticia, «el candidato Rubalcaba reparte regalos a cambio de fidelidad y promoción». Que los políticos le han dado una especial importancia a las redes sociales de cara a la campaña electoral es notorio, ya que unfollower puede significar un voto y ellos lo saben. Por eso, Alfredo Pérez Rubalcaba, @conRubalcaba en la redes sociales, ha instaurado un sistema por puntos con el que dar regalos a sus seguidores en función del respaldo que le brinden en las redes sociales.

El sistema es simple: sólo hay que inscribirse en la web www.Rubalcaba.es, desde la cual se puede compartir información, vídeos o fotos. Así, «cuanto más compartas en Facebook y Twitter más puntos obtendrás y podrás canjearlos por regalos promocionales de Rubalcaba».

Los regalos a los que se pueden aspirar van desde un cacao para labios de 250 puntos hasta una taza térmica de 1.700 puntos. El resto de regalos son un vaso termo por 1.600 puntos, un cuaderno Moleskyne, un polo o una taza «irrompible». Eso sí, todo en rojo y blanco y con el lema «Rubalcaba, Sí», siempre presente en los actos del candidato del Partido Socialista.

Poca confianza demuestra el equipo de Rubalcaba en el interés que suscitan las propuestas de su programa electoral, una confianza que es inferior a 3 euros, el precio por el que podrías adquirir uno de sus vasos de merchandising. ¿Cuántos puntos serían necesarios para conseguir un puesto de trabajo?

Reacción en twitter

En breves instantes, se traslada el debate sobre la campaña a twitter, donde se inicia una carrera a ver «quién la dice más gorda», y se compara con la ya famosa del #prostituit. Al principio, y a falta de otro hashtag, se comenzó a utilizar el ya conocido #prostituit, ya que muchos tuiteros lo consideraban semejante; pero a partir de las 19:30 el nuevo hashtag #puntosRubalcaba supera al anterior, y parece consolidarse, iniciando su camino hacia el Trending Topic ¿lo logrará, como ya pasó con #prostituit? (ver comparativa en Topsy.com).

Mientras sigue el debate jocoso en twitter, con ambos hashtags, la prensa digital continúa difundiendo la noticia, incluyendo una mención a las reacciones en twitter: EL PAIS, PUBLICO, EL MUNDO… y finalmente el equipo que gestiona la cuenta de @ConRubalcaba tuitea para aclarar el asunto:
No estoy seguro si a estas horas ya se les estaba pidiendo explicaciones a los gestores 2.0 de Rubalcaba, pero estos tuits me recuerdan a aquella vieja expresión que dice «excusatio non petita, acusatio manifiesta». Lo que sí tengo claro es que, con independencia de estos tuits explicativos, los tuiteros siguen con ganas de sacarle punta a esta promoción, y ya de paso ver si con las jocosas menciones a @ConRubalcaba logran el bálsamo labial (250 puntos) o el cuaderno Moleskine (auténtica reliquia fashion 1.0). Mientras los blogueros vamos publicando nuestros posts, os animo a echar un vistazo a la red, con «animus jocandi», y pasar un buen rato, pensando en estas cuestiones:

¿Para qué hacer un programa electoral, pudiendo hacer un programa de puntos?

¿Así considera el PSOE a sus votantes, y a sus seguidores en las redes, como meros consumidores?

¿Es lo mismo pedir prestado el twitter y el facebook, que pedir que compartan tus contenidos a cambio de regalos?

¿Es esto también prosti-tuit-ción de las redes?

La respuesta… en twitter. Más variada, y más creativa.